Historia
En el año 1937, en Barrio Crisol (antes llamado “Pueblo Colón”), las Hermanas Franciscanas Misioneras de la Inmaculada Concepción decidieron dedicar parte de su obra a la fundación de un colegio. Con ansias de apostolado inspirado por la Madre Ana, fundadora de la congregación y gracias a unos terrenos donados, con el acompañamiento de Monseñor Lafitte (obispo de la época), pudieron llevar a cabo esta importante tarea.
La espiritualidad del Instituto emerge del carisma de San Francisco y de los elementos que lo configuran: misionero y mariano.


¿Por qué nuestro colegio lleva ese nombre?
“En el año 1937, en este barrio entonces pobre, sin sacerdotes y sin capilla, abría sus puertas el colegio Nuestra Señora del Sagrado Corazón, puesto bajo esta protección debido a que la Hermana María del Sagrado Corazón Ros Muñoz era la superiora general de las hermanas Franciscanas Misioneras de la Inmaculada Concepción.
Fue en homenaje a ella que la Institución llevaría este nombre, siendo María, la Madre misericordiosa del Sagrado Corazón, un refugio para aquellas sesenta primeras alumnas.”